i
Para un fin de semana que me pedía el cuerpo ponerme a escribir, resulta que algún listo ha metido la pata con el antivirus del ordenador y ahora bloquea el acceso a las páginas webs. (Estoy usando el ordenador comunal del piso porque el mío está en el servicio técnico).
Hoy alguien ha querido instalar un CD-ROM que venía en una revista y no ha podido, porque los inquilinos del piso no podemos instalar nada. Entonces al cerrar la sesión algún programa que se ejecutaba con el menú del CD-ROM se ha quedado colgado y ha abortado el cierre. Cosas del orden con que se cierran los programas, el antivirus ha quedado desactivado y me he apoderado ipso facto del ordenador para aprovechar el tiempo perdido. Tenía mono de Internet.